CESAR ENRIQUE LOZANO RAMIREZ

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Espinal(Tol), Girardot(Cund), Colombia
Profesión: Contador Público, Especialista en Revisoría Fiscal y Control de Gestión, Especialista en Docencia Universitaria. Avaluador miembro activo de la Lonja Sociedad Colombiana de Peritos Avaluadores. Experiencia en Auditoria y Control Interno, Diseño de Procesos, Interventoría del Régimen Subsidiado en los Municipios, Implementación y Estructura de Costos ABC para entidades de Servicios Públicos, Docente Universitario, Gestión de Calidad. Auditoría y Revisoría Fiscal: Mi ejercicio profesional de Auditoría y Revisoría Fiscal se fundamenta en el estricto cumplimiento de las normas fiscales, financieras y legales con los mas altos estándares de calidad y ética profesional, con enfoques innovadores que permiten generar valor agregado a mis servicios, que optimicen la utilización de sus recursos físicos y humanos, y minimice los riesgos existentes en la operación de sus empresas.

viernes, 24 de agosto de 2007

LO QUE PENSAMOS DE LA CALIDAD

La calidad es una experiencia personal y subjetiva, porque nosotros como consumidores somos muchas veces confundidos en la compra de diferentes productos e inclusive servicios.

Una anécdota personal que tuve hace varios años, cuando cursaba 8º Grado en un colegio de El Espinal - Tolima, donde los hombres no usábamos uniforme solo las mujeres: Un día de clase el compañero más rico del salón hijo de un hacendado, llevó una camisa muy bonita de una marca prestigiosa de Ropa de Pereira (Risaralda – Colombia), la cual es de gran aceptación Nacional y Mundial, y supongo debió costarle a el o a su padre una buena suma de dinero. Lo curioso fue que ese mismo día yo me estrenaba una camisa igual, de la misma tela y estampado, solo la diferenciaba el diseño del bolsillo, y que la mía no tenía la prestigiosa marca sino una marca desconocida. Los compañeros de clase que a esa edad (12 – 17 años) somos bastante inquietos y vaciladores, empezaron a molestarlo que como así que yo traía la misma camisa del “niño rico”y que lógicamente la mía no había costado tanto. El punto anterior es un caso que como les dije realmente me sucedió, y no se si algo similar le haya ocurrido a alguno de ustedes. Vivimos en una sociedad de consumo, donde la gente no mira en muchas ocasiones sino sólo una “Marca” que les de un estatus y los haga sentir bien frente a los demás, como lo dice Andrés López en la “Pelota de Letras” que los que somos de la generación de la “Guayaba” exhibíamos la marca de zapatillas y de camisas o pantalones, la nueva generación creo que la “Y” exhibe la marca de sus pantaloncillos. También tenemos el caso de la imitación de los jeans “Levi’s Made in Colombia” que puso en aprietos a la fábrica norteamericana, porque se producían según ellos mismos, con igual o mejor “Calidad” que los “Originales”.

Muchas veces hemos sido confundidos en pensar que si queremos algo de Calidad tenemos que adquirir algo con una “Etiqueta” de prestigio, creyendo ciegamente que la Calidad está única y exclusivamente ligada a una “Marca”. Por eso varias personas siempre estamos acostumbradas a comprar determinados productos, o utilizar los servicios de la Firma XYZ, o el Restaurante “El Hambre” y cambiar o utilizar otro Producto o Servicio no se considera una opción. Esto sucede porque las Empresas han logrado “Posicionar” un Nombre y logran la “Fidelidad de sus clientes” que siempre los van a elegir, sin darse cuenta de las cosas que han sido narradas anteriormente, "No siempre lo más costoso es lo mejor".

La Calidad de un Producto o Servicio, es definida por “Los Clientes” pero no sólo aquellos que compran, sino por todos los clientes internos y externos que tenga la empresa. Bien es cierto que los Clientes que compran son las primeras personas que deben quedar satisfechas, y son los que dan el rumbo de las formas, colores, olores, sabores, diseños, duración, resistencia, atención, amabilidad, seguridad, tranquilidad, beneficio que obtengan con el dinero que pagan por el producto o servicio, sintiendo que han recibido algo merecedor de la suma de dicho dinero que pagaron por el. Sin embargo hay que tener en cuenta que estos productos o servicios no se generan por arte de magia, y el empresario o la Sociedad no son autosuficientes para estar en todos los procesos y actividades necesarios para la obtención del producto final. Empecemos por mirar las materias primas o productos que suministran los Proveedores: son los adecuados?, responden a los requerimientos de nuestros clientes?, tienen el precio justo que no incremente el costo de producción que se verá transferido al precio de venta?, tenemos las políticas adecuadas de negociación con los proveedores donde ellos se sientan a gusto y nosotros como sus clientes también?, sus entregas son oportunas?. Ahora apreciemos la correlación de la Calidad con los empleados: son el personal idóneo y capacitado para realizar las funciones dentro de los procesos de la empresa?, tienen el ambiente apropiado para el desempeño de sus funciones?, están bien remunerados?, se sienten a gusto trabajando en la empresa?. Si a alguna de las anteriores preguntas hemos contestado NO, tengamos la plena seguridad que habrá fallas en la calidad, y estas personas también ayudan o definen de forma directa la Calidad de los Bienes o Servicios que ofrece la empresa, por lo tanto es necesario no solo tener en cuenta la apreciación del cliente que compra, sino de todos los clientes internos y externos de la empresa que nos impulsan a realizar las cosas mucho mejor.

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